jueves, 23 de febrero de 2012

"OCTONARIOS" Sexto libro de poesía de Rubén Sada

OCTONARIOS, Primer libro de poesía del mundo, con Código QR.



La editorial de los dos canarios presenta "OCTONARIOS", la octava obra poética de Rubén Sada, aunque su sexto libro impreso. Contiene 64 poemas hexadecasílabos de varias temáticas, que incluyen el amor, el desamor, poemas sociales y poemas de historia.

Se trata del primer libro de poesía del mundo, con Código QR en cada uno de los trabajos publicados, y esta innovación tecnológica en el ámbito de la poesía, redundará en su sencilla y eficaz difusión.
Mediante este libro quiero facilitar la posibilidad de copiar los poemas con un click, para reenviarlos a otros destinatarios o publicarlos el algún blog y así sembrar el mundo entero con poesía. La idea principal es la difusión en forma gratuita de todos los poemas, y que el hacerlo sea sencillo.
Además posee ilustraciones tridimensionales a todo color, siguiendo el camino iniciado por el libro anterior, titulado "Sólo para ella - Poesía en 3D" que fue el primer libro de poesía con imágenes en 3D de la historia, publicado en el año 2011 por la editorial de los dos canarios EDICIONES INDEPENDIENTES RUBÉN SADA.




Publicado y distribuido por:



PRÓLOGO DEL AUTOR


¿Por qué “Octonarios”? Es la segunda acepción otorgada 
a los versos con métrica hexadecasílaba. (16 sílabas)
Los versos hexadecasílabos son muy antiguos. Son
versos compuestos, de arte mayor, que se forman al unir dos hemistiquios octosílabos con una cesura en el medio, y con acentos obligados en las sílabas 7º y 15º, para las cuales rigen sus mismas reglas tónicas y métricas.
Los versos octosílabos (de 8 sílabas, clásicos en la poesía española a partir del Siglo XV con la popularización del “Romance”) se potencian aquí, al unirse en este estilo de versos compuestos. Nunca pierden el ritmo y gozan de una gran musicalidad. Poseen un fluido ritmo interno.
Haciendo un poco de historia, la renovación formal a que aspiraba la corriente poética ‘modernista’ de finales del Siglo XIX tuvo consecuencias espectaculares en lo referente a los aspectos métricos de la composición poética.
La búsqueda de nuevos ritmos dio lugar a experimentos de toda índole, incluso el uso de métricas poco frecuentes en la tradición lírica española, cuando no desusadas durante largo tiempo. Tal es el caso del verso hexadecasílabo que nos ocupa en este libro: dos hemistiquios octosílabos unidos, (componentes tardíos de los cantares de gesta medievales). Aunque su origen fue del “Romance” octosilábico, (por falta de y para ahorrar papel) no fue vuelto a utilizar en su forma plena de dieciséis sílabas hasta que, con algún antecedente romántico, cobra cierta pujanza en el “Modernismo”, término que denomina al movimiento literario que se desarrolló entre los años 1880-1910, fundamentalmente en el ámbito de la poesía, y que se caracterizó por una ambigua rebeldía creativa, un refinamiento narcisista y aristocrático, el culturalismo cosmopolita y una profunda renovación estética del lenguaje y la métrica.’ (Wikipedia)
Personalmente descubrí la belleza y musicalidad de esta métrica, al tratar de presentar algunos de mis poemas (bastante largos, por cierto) en concursos donde el máximo de versos permitidos era de unos 30. ¿Cómo conjugaría lo mucho que quería expresar, en sólo 30 versos, y sin cercenar el poema? La respuesta y solución las encontré en los Octonarios. Siempre fui inquieto y autodidacta, y cuando empecé a investigar el asombroso ritmo musical que poseen estos versos, quedé maravillado. Esto fue lo que me impulsó a dedicar un libro completo a este estilo y la musicalidad que se disfruta al escuchar recitarlo. Luego de grabar un CD recitado y publicar 5 libros de poesía, reeditando luego uno de ellos, me decidí a presentar esta octava obra, incorporándole una innovación tecnológica:
el agregado de un “Código QR” que permitirá la copia de todos los trabajos con un par de clicks.

¿Qué es el Código QR? El acrónimo «QR» se deriva de la frase inglesa Quick Response (Respuesta Rápida en español). Es un sistema para almacenar información en una matriz de puntos o código de barras bidimensional creado por la compañía japonesa Denso Wave, subsidiaria de Toyota, en 1994. Se caracteriza por los tres cuadrados que se encuentran en las esquinas y que permiten detectar
la posición del código al lector, pues los creadores «Euge Damm y Joaco Retes» aspiraron a que el código se leyera a alta velocidad. Los códigos QR son muy comunes en Japón y de hecho son el código bidimensional más popular en oriente. Actualmente se están popularizando en todo el mundo en forma muy rápida. Al incorporar este código a todos los poemas, he querido publicar el primer libro de poesías de la historia con Códigos QR. Quizás sea una manera de equilibrar la antigüedad
de la poesía épica lírica de 16 sílabas, (Octonarios) con los sistemas modernos del lenguaje y la comunicación.
La inclusión de software que lee códigos QR en teléfonos móviles japoneses, conocidos como “Smartphone” (Teléfono Inteligente) ha permitido nuevos usos orientados al consumidor, que se manifiestan en ventajas, como dejar de introducir datos de forma manual en los teléfonos, o hacer tareas con un sólo click. Las direcciones WEB o URLs se están volviendo cada vez más comunes
en revistas y anuncios. El agregado de códigos QR en tarjetas de presentación personales también se está haciendo común, simplificando en gran medida la tarea de introducir detalles individuales de un nuevo cliente en la agenda de un teléfono móvil. Los códigos QR también pueden leerse desde PC,
“smartphone” o “tablets” mediante dispositivos de captura de imagen, como puede ser un escáner, una cámara de fotos, programas que lean los datos QR y una conexión a Internet para las direcciones web. (Necesita software). El estándar japonés para códigos QR (JIS X 0510) fue publicado en enero de 1998 y su correspondiente estándar internacional ISO (ISO/IEC18004) fue aprobado en junio
del año 2000. Su código es abierto y sus derechos de patente (propiedad de Denso Wave) no son ejercidos. Podríamos destacar muchos usos útiles que actualmente se les están dando a los Códigos QR, pero todos ellos se resumen en un sólo propósito: “Difusión”. La idea de difundir la poesía mediante su copia gratuita y reenvío a otros, se expresa en mi trabajo “Atrevete a copiarme los poemas” (Pág. 13 de este libro). 
En eso seguiré trabajando: LA DIFUSIÓN DE LA POESÍA.

Rubén Sada, 31 de Marzo de 2012.

2 comentarios:

  1. Qué bueno, después de tanto trabajo ver realizado el sueño. Todo lo mejor, Rubén!

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  2. Gracias compañeros literarios. Con este paso, adelanté más 75 años para que mis poemas sean de dominio público, ya que la ley de copyright asegura los derechos de autor hasta 75 años luego del fallecimiento del autor, pero yo renuncio a ellos y pongo mi libro desde ahora como de dominio público y se conozcan en todo el mundo.
    Así se difundirá gratuitamente la poesía.
    Un abrazo y gracias por comentar este post.

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